lunes, 20 de diciembre de 2010

Colisión

- ¿Quieres oir música de los opresores? Adelante, tío.
- ¿Desde cuando la música hip hop es la música del opresor?
- Escúchala bien... Negrata aquí, negrata allá... ¿Crees que los blancos van por ahí llamándose lechoso todo el día? ¡Eh, lechoso! ¿Qué tal va el negocio? ¡Muy bien, blanquito! ¡Diversificando! No tienes la menor idea de dónde procede el hip hop, ¿verdad? En los sesenta teníamos negros inteligentes y bien hablados. Como Wayne Newton, Odie Seal, Eldrich Clivert, Fred Hauton, aquellos negros sabían hablar y la gente los escuchaba. Y el FBI dijo: ¡No, no, no es posible!... Ya sé, daremos a los negros esta música que está hecha por idiotas, y tarde o temprano la copiarán y nadie podrá entender una puta palabra de lo que digan. Fin del problema.


Diálogo extraido de la película Crash, dirigida por Paul Haggis.

Aw, man!

A las ocho de la mañana me desperté en la parte trasera del coche pensando que ya estaría cerca de mi barrio. Para mi sorpresa, lo primero que vi al abrir los ojos fue una maldita estación de peaje. Íbamos a llegar a Salamanca, muerto de sueño por mi parte y con pocas ganas de salir del banquillo. Sólo supe entonar lo siguiente:



Al final no se trató de una broma, ni de una proposición con reducida fecha de caducidad. Ni falta que hacía, porque a esas alturas de la película el punto de no retorno se alejaba al mirar por el espejo retrovisor. Hacía falta positividad e invocar al espíritu de Van Gaal. Me cambié el asiento con el copiloto y llegamos hasta nuestro destino. Y lo que en un principio nos pareció un acto de locura instantánea, que sin duda lo fue, se convirtió en uno de los mejores sábados del año.

Long Island
s a un euro, crudo frío de Los Andes y comida casera caliente; dos baños: uno en la ducha del hotel con agua sacada de la laguna Estigia y otro futbolístico desde Cornellá; copas gratis, chicas guapas y verdadero ambiente universitario; luces amarillas y calles extraidas de Camelot, monumentos apabullantes, cerveza alemana y amplio recorrido de la ciudad. Cientos de locales y la certeza continuada de que iba a ser una buena noche.

Salamanca, we love you.

Una mañana peleona

Las paredes de la Universidad temblaron y en el hombro me salpicó un poco de techo desprendido. Fue en ese momento, tras el agónico rugido de tripas, cuando me entraron unas ganas mortales de ir al cuarto de baño. El reloj me decía que no era el momento más adecuado, pero ESO tenía que salir, aunque significara llegar tarde al examen.

Una vez convertido el trono de Roca en las ruinas de Nagasaki, salí ciego de satisfacción y dispuesto a limpiarme el culo con la evaluación. Cuando entré en en el aula, todos mis compañeros estaban sentados y a punto de comenzar el examen. Quise ir a mi sitio, pero tras dirigirme una mirada inquisitiva, el profesor negó con la cabeza y señaló la puerta con la misma, como ejemplo ilustrativo de que se negaba a examinarme por mi falta de puntualidad.

No me inmuté. Ni siquiera me planteé salir de la clase. Fui tranquilamente a su mesa, aclaré la voz y me incliné hacia su oído izquierdo.

Le conté la forma que adopta el miedo cuando navega entre café y salchichón. Le hablé de la masa que se forma en el cuerpo a base de gritos y materia en descomposición. Bandidos de mala madre se estremecen como niñas al oír las leyendas de la montaña marrón que encoje las almas y se las come. Le expliqué el nacimiento de la locura, y el río de fluidos fecales en el que desemboca. En definitiva, le hablé de la mierda que me vi obligado a expulsar para que entendiese el por qué de mi tardanza y así me absolviese.

El profesor no movió ni un solo nervio. Los ojos, fijos e inexpresivos, se le humedecieron a medida que sus vasos capilares enrojecían. Abrió la boca y soltó un quejido casi imperceptible, pero que pude descifrar con claridad:

-"Ah... adelante"


Mis compañeros no daban crédito a lo ocurrido. No pudieron escuchar lo que le dije al profesor, pero aún así percibieron aquellas palabras como una intensa declaración de intenciones. Pensaron que le dije alguna barbaridad, algo digno de El Padrino. Cabezas de caballo entre las sábanas y esas cosas. No quise desmentirlo.

Ahora soy Vito Corleone y sé qué forma escoge el terror a las once de la mañana.

Y no, esto nunca ocurrió.

martes, 14 de diciembre de 2010

"¿Te parezco gracioso?"

Joe Pesci, uno de los actores fetiches de la época dorada de Scorsese y responsable de dos de los personajes más impactantes de su filmografía, probó suerte en el mundo de la música antes de triunfar como actor. Tras fracasar como solista, en 1998 aprovechó su popularidad para sacar un disco llamado Vincent Laguardia Gambini Sings Just for You, cuyo título está basado en el personaje que él mismo interpretó en la película Mi tío Vinny.

Hasta aquí todo normal, hasta que descubro que el single es un tema de rap. Su nombre es Wise Guy, y en el videoclip Joe Pesci aporta el porte y la presencia de todo un capo mafioso, claramente influenciado por aquellas magistrales interpretaciones que realizó junto al director de joyas como Uno de los Nuestros o Casino.

No seré yo quien juzgue la calidad de la canción, pero creo que la curiosidad es para enmarcarla.



Viendo su compañía femenina, queda claro que Pesci is a wise guy.

martes, 30 de noviembre de 2010

Filosofía 4-3-3

Si en un partido de fútbol uno de los dos equipos no se presenta al terreno de juego, el encuentro lo gana automáticamente su rival por tres goles a cero. No obstante, durante el Clásico sólo apareció un equipo en el campo, y el resultado acabó con una manita a favor del F.C. Barcelona. Más pragmático hubiese sido para los blancos quedarse en el hotel.

Ayer se disputó el duelo de titanes de la Liga. Sin embargo, durante un largo periodo de tiempo no me pareció estar viendo un choque de potencias sino una película porno; un sometimiento a cuatro patas con face fucking incluido. No se trató de un baño futbolístico, sino de una lluvia dorada de las que quema en la piel.

No hablo del qué, sino del cómo. Hablo de la satisfacción que produce ser testigo y simpatizante de uno de los equipos que mejor practica este deporte desde que se creó. El Barça no sólo gana, también deslumbra. Hipnotiza, construye y define. Es el toque convertido en lienzo, billar en una mesa de 105 metros; la clase y el hueco que precede el golpe sobre la red. Esos cabrones saben a lo que juegan y sus exhibiciones están por encima de lo que ofrecen el resto de escuadras. Son los alumnos aventajados de un estilo de juego que sólo unos pocos son capaces de poner en práctica. Hablo de símbolos como Sacchi, Cruyff o Wenger.

Lástima que todavía siga habiendo personas que niegan la evidencia y buscan excusas para no rendirse al juego desplegado por el Barcelona.

PD: Como diría el medio Sport24... Special One, 2, 3, 4, 5!

domingo, 28 de noviembre de 2010

Cortina de humo

Hace unas horas me metí en la página web de El País. La primera noticia, de grueso y atractivo titular, estaba dedicada a las elecciones catalanas. Al final del primer párrafo se informaba que los resultados aparecerían a partir de las ocho de la tarde. Previsiblemente CiU se hará con el poder.

Acabo de entrar de nuevo hace unos minutos y descubro perplejo que la primera noticia no trata sobre las legislativas en Cataluña. En su lugar aparece una serie de retratos pertenecientes a diferentes líderes mundiales y un titular absolutamente mastodóntico que reza: "Los secretos de la diplomacia de Estados Unidos, al descubierto".

Más abajo encuentro la información que anteriormente ocupaba la primera página virtual. CiU vence y el PSC retrocede.

La filtración de los documentos del Departamento de Estado americano me parece una noticia muy interesante, pero es mucha casualidad que El País la saque a relucir y le dedique un espacio tan amplio justamente cuando el partido político con el que simpatiza ha perdido las elecciones en tierras catalanas.

Cosas del periodismo.

martes, 16 de noviembre de 2010

Mano bien recta

Dentro de poco abrirán en mi ciudad otra cafetería al estilo de las que había en Norteamérica en los años 50. Me huelo que las facturas irán acompañada de un sable, ideal para establecer recargos a quienes hayan sido capaces de abonar siete euros por una hamburguesa del tamaño de un filipino. Y hablando de filipinos, Manny Pacquiao consiguió este fin de semana el título mundial de Peso Superwelter tras derrotar a Antonio Margarito por decisión unánime. Actualmente posee ocho títulos mundiales obtenidos en diferentes categorías. Record pugilístico absoluto. Además, las consecuencias de su victoria formalizaron uno de esos ejemplos de justicia poética que tanto me gustan: días antes del combate, Margarito se burló en un vídeo de la enfermedad de Parkinson que sufre el entrenador de Pacquiao. Ahora, tras la tunda que recibió en el cuadrilátero, tendrá que ser operado ya que sufre la fractura de un hueso orbital en su ojo derecho. Jódete.

viernes, 5 de noviembre de 2010

Un hombre y su guitarra

No soy una persona que idolatre con facilidad. En realidad, soy bastante reacio a mostrar más admiración de la debida hacia nada ni nadie. Con todo esto, he de admitir que me habría encantado ser amigo de los Rolling Stones. Si hablo en pasado es porque considero que no debía ser lo mismo salir de juerga con ellos en los años sesenta que hacerlo ahora con sus más de sesenta años; aunque es muy probable que a pesar de su edad, Keith Richards nos diera a más de uno una paliza en cuanto a ingesta de alcohol se refiere. Qué demonios, sufriría una mañana de inconsciencia con tal de compartir una noche de fiesta con gente así. Gente que lamentablemente pertenece a otra época, y cuyo legado ha pasado a manos de grupos con los que no compartiría ni una coca cola.

Hace poco vi Shine a Light, es decir, la grabación de un concierto que dieron en 2006 sus satánicas majestades y que rodó Martin Scorsese. Una de las mejores partes es, sin duda, la colaboración de Buddy Guy en el tema Champagne and Reefer. Este hombre devora el escenario con su aparición, reduce a los Stones a un papel secundario y consigue elevar dos palmos la calidad de la actuación.

Enorme Buddy Guy.




Give me champagne when I'm thirsty
Give me a reefer when I wanna get high
Give me a woman when I get a-loney
And set her right down here by my side

Que pase el siguiente

La fórmula MTV ha copulado en las entrañas de Antena Neox. Se ha bajado la bragueta y ha impregnado de semen su interior sin dejar un mísero billete en el tocador. Gracias a ese gesto colonial, ha florecido la versión castellana de un programa de carácter juvenil: Next!

El programa consiste en una batería de citas express: seis personas que se hayan reunidas en un bus tienen que cortejar, de una en una, a otra persona del sexo opuesto (o no, depende de si sacan gays en pantalla), quien busca conocer a alguien especial. Si por ejemplo, el grupo es de chicos y a la chica en común no le gusta el aspirante que tiene delante, le puede decir Next y mandarlo a tomar por culo, oséase, de vuelta al autobús. Los minutos que aguanten los participantes se traducen en euros, y si la chica termina escogiendo a uno, el elegido debe decidir si quedarse con la muchacha o con el dinero.

Hay personas que no duraron ni cinco segundos. Yo no podría volver a mi casa después de algo así. Y ellos tampoco deberían. Quiero decir, que si a mi hijo se le ocurre ir a un programa de ese tipo, para empezar le desheredaría, pero como encima haga el ridículo, le dejo una maleta en la puerta de casa y un mapa con círculos dibujados sobre un par de moteles.

Sinceramente, no entiendo cómo puede haber gente que se ofrezca voluntaria para ser humillada de esa manera. Si se tratara de Humor Amarillo, lo entendería, porque es un programa fomentado en la comedia. Pero en este caso, ¿cómo pretende un chico de bien volver a su barrio después de hacerse el gallito y durar un minuto con una chica que ni le ha mirado a la cara? ¿De verdad compensa un euro atravesar este ridículo? Y por mucho que la chica sea educada, y le haya dicho que aunque le cae muy bien, no es su tipo... ¿merece un puto euro esa pérdida de tiempo?

Normalmente a los aspirantes les ponen pruebas. Hubo un tipo cuya pretendiente, que era jinete, le pidió limpiar sus botas de montura. Nada más terminar, le dijo Next.

¡Zas!

Algunos pensarán, ''pero si participas, puede que encuentres a una tía cojonuda y acabes saliendo con ella". Claro, y si mi tía tuviese pene sería mi tío. Es un show televisivo, no una agencia que distribuye felicidad altruistamente.

Es simple probabilidad. Dudo que los planetas se alineen y coloquen a tu Diosa Esmeralda resoplando por tus carnes. De eso nada. Es más seguro que te rechacen, y encima alguien que puede que ni te guste. Sólo eres un peón que los directivos del show utilizan para abastecer de ingenuos su temporada televisiva. Se aprovechan de vuestro orgullo y de que pretendáis demostrar lo que valéis frente a una hembra. Luego viene la caída y la sangre en las encías.

Hacer el ridículo sólo es justificable en la vida real. Si una chica te gusta y te lanzas a por ella, aunque te vomite encima del asco habrás hecho bien en intentarlo. Olé por tus huevos. La vida es un sinfín de tropiezos que esculpen tu carácter y dan forma a tu persona gracias a la acumulación de experiencia. Todos hemos hecho el ridículo alguna vez. Aprendemos y mejoramos, y la satisfacción de habernos lanzado al vacío no nos la quita nadie. Es mejor intentar algo que no hacerlo, muchacho.

Pero un jodido programa de televisión es otra historia. ¿Qué fin tiene participar en un programa como Next? ¿A quién le interesa lo que yo haga en una cita? Me parece que todo se basa en el placer que a los participantes les produce verse en una pantalla, y en el convencimiento que tienen de ser capaces de salir airosos de una situación que pone a prueba su condición de macho alfa.

Las razones que pueden llevar a alguien a participar en un sitio así son de una índole limitada. Las he rumiado y ninguna me convence.

Y sin embargo, suelo ver el programa cuando llego a casa. Me lo tomo como si fuese ese niño que tortura a las hormigas con una lupa. Quemaos, amiguitos, quemaos en vuestra vanidad.

Que os aproveche vuestra ingestión de ego. Acabaréis por atragantaros.

sábado, 30 de octubre de 2010

Fashion Victim

La prueba del crimen:


Veredicto: las nuevas botas de CR7 son de putita.

Problemas lingüísticos

HIJO: Papá, ¿Picasso vendió el Guernica o lo donó?
PADRE: Lo vendió. No era un tío muy misántropo, para que vamos a engañarnos.
HIJO: ¿Misántropo?
PADRE: ¿Sabes lo que significa?
HIJO: Sí.
PADRE: Pues eso.
HIJO: ¿No habrás querido decir filántropo?
PADRE: Esto...
HIJO: Jajaja.
MADRE: ¿Qué burrada ha dicho tu padre?
HIJO: Ha dicho misántropo cuando quería decir filántropo.
MADRE: Vaya lumbreras.
PADRE: ¿Acaso tú sabes lo que es un misántropo?
MADRE: Un hombre lobo, ¿no?
HIJO: Eso es un licántropo.
MADRE: Esto...

sábado, 23 de octubre de 2010

Exceso de humos

Si buscáis una persona de tono maleducado y verdulero, repelente en el trato y experta en crear repulsa, sé de una chica en mi clase que os podría servir para vuestra película snuff.

Atiendo llamadas a cualquier hora del día.

domingo, 17 de octubre de 2010

Extracto de laboratorio

Desperté, para descubrir que aquella iglesia que tanto visitaba quedaba a kilómetros de distancia...

Parece que con la madurez he ampliado mis miras, no exluyo mecánicamente y valoro con un criterio más reposado. He abierto el círculo de cemento que construí con quince años y aflojo la cuerda para que la tensión no la rompa. Eso sí, respecto a la música, todavía distingo la mierda que sirven en el buffet libre. Que advierta atisbos de calidad en productos que no hubiese escuchado hace unos años ni siendo amenazado con una segueta en los testículos, no quiere decir que pase por el aro todo lo que los medios están empeñados en convencerme que es bueno.

Sigo siendo un Outsider, pero más racional y perceptivo. Como si al formarme una opinión supiese que he recorrido la línea de puntos adecuada, aunque siempre haya tendido a radicalizar mis discursos.

A lo mejor esto cambia mañana y sólo se trate de una percepción temporal, de un pasaje empapado en perfume.

Me resulta extraño no tirarme un cubo de basura a mí mismo.

Malas pulgas

Es curiosa la actitud de ciertos perros. Nunca me han despertado demasiada simpatía, y menos cuando se ponen pesados; pero peor que un perro que no deja de dar vueltas y saltar sobre tus piernas para llamar la atención, es un perro que muerde sin que te lo esperes.

Hace años leí (o me contaron, no estoy seguro) la historia de un perro que jugaba continuamente con el nieto de su dueña, un niño de corta edad. Un día, la abuela abandonó la casa para hacer unas compras, y cuando volvió encontró al pequeño muerto y con numerosas mordeduras por el cuerpo. Según contaron ciertos entendidos, el animal le atacó por un motivo de celos.

Otros casos más conocidos son los de perros que mientras pasean, se les cruzan los cables y se lanzan al cuello de otras mascotas, y en el peor de los casos, de niños pequeños. Los mismos entendidos comentan que ocurre porque se sienten agredidos y provocados. Dentro de la cabeza del chucho puede parecer razonable, pero para una persona estas acciones no tienen defensa alguna teniendo en cuenta el alcance de las consecuencias.

La solución suele pasar por ejecutar al perro.
Hay gente más precavida que opta por no tenerlos.

Con las personas puede pasar algo similar. Perciben agresiones donde no las hay, y al sentirse atacados sacan los dientes. En este momento es cuando ignorar se convierte en la correa más eficaz.

Hay veces que estar en silencio es el mejor arma para darte la razón.

viernes, 15 de octubre de 2010

Tarde, compañero

La virulencia de un acto irracional pero justificado sembró la migraña. La adrenalina se secó, y tras la piel levantada sólo quedó una moqueta roja que se deshacía en un goteo continuo. Y sus ojos. Una cueva de murciélagos, eso es lo que eran. Y vaya nudillos, abiertos como un huevo roto, imposibles de reconstruir.

Aun sin sensibilidad en las manos, sólo le preocupaba el dolor de cabeza que comenzaba a clavarse sobre sus nervios. Desde que el individuo al que golpeó dejó de moverse, no había sido capaz de abrir los ojos por culpa de la jaqueca. Los apretaba con ansiedad, deseoso de que desapareciese aquella orquesta de golpes de martillo y palas oxidadas que se clavaban en su cerebro.

No se oye pensar. Oye a su dolor, un grito enfermo; y nota cómo el peso de sus actos cae hacia un suelo lleno de grietas. Pero entre todos los sonidos que evoca, no encuentra el de su voz.

Intenta relajarse, de veras que lo intenta; pero sabe que está fuera de su control. Mientras sus dientes luchan por atravesarse los unos a los otros, las sienes le oprimen el cráneo de la misma forma que una imprenta aplasta un folio para entintarlo. El calor tampoco ayuda a su estado. Sudor culpable, que se torna frío como castigo. Y entre temblores, continúa sumergido en un lago de ruidos, en un huerto que rastrilla su cabeza y planta dinamita bajo sus sentidos.

Explota la conciencia. Las ideas se ordenan caóticas tras el estallido y la maraña de sentimientos cobra sentido. La tormenta se disipa y las aguas recuperan su ritmo habitual.

Cuando consigue diluir el dolor, el sol cubre su espalda, obligando al cuerpo que tiene bajo sus pies a hundirse en la silueta de su agresor. Está algo incómodo, pero a pesar de todas las molestias que provoca un ataque de ira acumulada, se siente liberado.

La culpabilidad emigró hacia costas menos sucias, y pudo oirse a si mismo felicitándose, sabedor tras tantos miedos de que las armas de la moral no pudieron con él.

Una sirena le sacó de sus pensamientos, y el rastro de polvo que levantó al iniciar la carrera sirvió de manta a su víctima. Puso a prueba los músculos de sus piernas y huyó lo más lejos posible, para que así la justicia de los hombres no interrumpiese su vendetta.

jueves, 14 de octubre de 2010

Últimas referencias positivas

Entrando en mi cabeza...

ON

John Legend and the Roots - Wake Up Everybody (feat. Common and Melanie Fiona)


Make The Girl Dance - Kill Me


Mike Posner - Cooler Than Me


Flobots - Handlebars


Saliendo de mi cabeza...

OFF

jueves, 16 de septiembre de 2010

El día en que las plaquetas hicieron horas extras

Tengo una herida en el dedo índice de la mano derecha, provocada presumiblemente por una quemadura. No es muy grande, pero duele, y la verdad es que no recuerdo cómo llegó hasta ahí. Pues bien, desde este rincón hago un llamamiento a todos los físicos del planeta para que me expliquen por qué narices todos los golpes que recibo van directos a ella. He dejado de contar las veces que he tenido que retirar la costra y cerrar el agujero con saliva.

Maldita sea.

Racoon de Henares

Todavía puedo distinguir con claridad, gracias a las fronteras dibujadas en la cintura y en la parte superior de las rodillas, las dos tonalidades de piel que dividen mi cuerpo. Todo moreno exceptuando la zona que cubría el bañador. Parezco una galleta oreo. Esta estampa es una imagen impresa que hace que recuerde in situ mi paso por la playa.

He sido marcado por el hierro candente del verano como una vulgar vaca, y al igual que ellas voy directo al matadero. Solo que mi ejecución no será una fiesta de acero y carne, sino una sucesión de acontecimientos orquestados por la rutina.

Cuando quiera darme cuenta, volveré a ser un zombie blanquecino. Un errante de la urbe que disfruta atravesando paneles de viento y moquetas de asfalto helado.

No quiero cerebros. Sólo cinco minutos de playa.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

El valor de la credibilidad

Según la opinión de José Mourinho (creo que sobran las presentaciones), es más fácil ganar un Mundial de fútbol que ganar la Champions League.

Odio cuando este hombre, cuyas declaraciones suelen bailar entre lo corrosivamente sincero y la parcialidad más ridícula, desvía su mirada crítica y se pone bizco para ganar unos cuantos flashes de más. El tipo no me cae mal, pero se vuelve muy pequeño cuando cubre sus arriesgadas opiniones con un sombrero de bufón.


Un Mundial de fútbol se organiza cada cuatro años, a diferencia de la Liga de Campeones, que se disputa cada uno. No es difícil deducir que la probabilidad y las oportunidades de ganar un Mundial son mucho más escasas que las del máximo campeonato europeo de clubes. Un futbolista de élite podría jugar en toda su carrera tres mundiales, cuatro como mucho (sólo dos jugadores han disputado cinco torneos). No hace falta ser muy futbolero para darse cuenta que no es tarea sencilla hacerse con el campeonato con tan pocas ocasiones, la verdad. Eso sin contar que sólo ocho selecciones han conseguido la copa mundial. Olvídate si eres escocés, congoleño o lituano: aunque tu talento obligase a que Maradona te limpiara las botas, no vas a levantar la copa ni en la Xbox.

Sin embargo, la Champions League se disputa cada año. Cada doce meses, una nueva oportunidad con eliminatorias a doble partido. Posibilidad de remontar resultados en contra. A más campeonatos por disputar, mayor probabilidad de victoria. No pienses en la historia de tu equipo y confía en él; si clubes como el Estrella Roja de Belgrado, el Steaua de Bucarest o el Borussia de Dortmund tienen su Champions, cualquier escuadra con talento y un año de suerte puede soñar con conseguirlo.

En un Mundial, las selecciones se concentran de vacaciones en un campo de batalla, apiñados para escalar cada peldaño internacional, sin otra cosa en mente que hacer las maletas tras la final y con una medalla dorada entre los calcetines. Los equipos son más feroces. Cada detalle importa. Todos muerden y están dispuestos a sangrar.

Por contra, en una Champions League influyen diversos factores que afectan a la concentración y a la organización del equipo. Los partidos se disputan en medio del campeonato liguero, por lo que el entrenador ha de economizar a sus jugadores en las alineaciones. Además, existe una mayor exposición a las ausencias por culpa de las lesiones. Los clubes no siempre pueden alinear a los mejores, y su juego se resiente grisáceamente sobre el césped.


Pero sólo es mi opinión. Él tendrá la suya, aunque ya sabemos cómo le gusta a Mou manejar la escoba para barrer el polvo hasta el interior de su casa, hoy pintada de blanco. Sinceramente, no me disgustan los dardos que tira, excepto cuando le falla la credibilidad.

Hace poco incluso afirmó que Cristiano Ronaldo no era de los que hacía teatro. Creo recordar que cuando entrenaba al Chelsea opinaba todo lo contrario. Da igual. Respecto a su nuevo punto de vista, sólo miren y juzguen.

domingo, 12 de septiembre de 2010

Algo sucedió

Shyamalan, me has fallado. Tú, un tipo con talento y responsable de las obras cinematográficas más fascinantes de los últimos años, has creado un engendro tan vergonzoso que haría sonrojar a Uwe Boll.

A pesar de que su calidad no se acerca ni de lejos a la de tus anteriores trabajos, no pierdo la esperanza en tu persona porque sé que este traspiés ha sido fortuito. Se ha tratado de una fallida incursión en el cine de alto presupuesto, por lo que cuando vuelvas a tu hábitat natural para embarcarte en otro proyecto podrás retomar tus inquietudes y hacer de nuevo cine de calidad.

Te esperamos de vuelta.

martes, 7 de septiembre de 2010

Depredador y presa

Sayonara, summer time.

He vuelto, tatuado con la marca de veinte picaduras de mosquito y con el ánimo sin uñas de tanto escarbar bajo tierra. Con los codos pelados y sin la piel bañada en lejía. Repleto de agujetas, habiendo hecho más deporte en mes y medio que durante el resto del año. Relleno de ginebra y tónica. Con planes, cientos de ellos. Pero sin un rumbo formal a seguir, como siempre. Con el sueño trastocado por Nolan, rezando para que nunca llegue esa patada que me envia a la Universidad cada mañana. Fijando la vista en un barco, una cámara y un ordenador sin estrenar.

Vaciando la mochila para volver a llenarla.

miércoles, 2 de junio de 2010

El gran BM

Después de descojonarme con el excelente cameo de Bill Murray en Zombieland, y de pasar una excelente mañana gracias a la película Atrapado en el tiempo, he investigado un poco por el tubo más famoso de internet y he encontrado un vídeo en el que el mencionado actor presenta la actuación de Eric Clapton en el Crossroads Guitar Festival de 2007. Antes de dar paso al ex-miembro de Cream, el señor Murray se toma la libertad de versionar como puede la canción Gloria de otro grande de la música: Van Morrison. Impagable.

Simple

Sniper - Trait pour trait

Menos películas, forasteros.



Altamente representativo.

lunes, 31 de mayo de 2010

Diccionarios gratis

Entramos seis personas en el ascensor del hotel y una de ellas presiona el botón de la última planta. Yo también voy a la azotea. Mientras subimos, una voz envuelta en acento italiano dice tímidamente que él se dirige a la quinta. Introduzco el dedo en el número cinco y una vez arriba me aparto para dejarle paso. La puerta se abre y el hombre se despide de nosotros:

- Hola.

Al parecer, los españoles no somos los únicos que hacemos el rídiculo cuando hablamos otro idioma.

lunes, 10 de mayo de 2010

Mal olor

Estoy rodeado de basura. De cáscaras de plátano, de hojas rellenas con mi firma y perchas con olor a metal caducado. Duermo entre chatarra que vomita cuarenta canales antaño analógicos y periódicos antiguos repletos de notas; entre pañuelos empapados en saliva verde y montañas hechas con cáscaras de pipas.

Si salgo a la calle, la basura me espera fuera.

Banderas bordadas con el color de la esperanza izadas al revés, botellas de whisky hechas añicos y un cadáver apoyado sobre una columna me dan la bienvenida. Latas de comida vacías, bolsas pisadas y vasos agrietados de tanto apretarlos se mezclan entre charcos marrones y jugo gástrico. Atrapado entre palabras malsonantes que se adhieren a mi espalda como tiza, las voces pusilánimes procedentes de la basura intentan poner peso a uno de los lados de mi balanza para que pierda el equilibrio. Buscan crear conflictos, poner excusas y apretar el gatillo apuntando con la culata.

Bon voyage.

Tendrán que comprar unas alzas para estar a la altura de mi desprecio hacia ellas, hacia las ratas que viven en la basura de la noche. Se reúnen en castillos de arena, no les gusta que se haga ruido cuando la luna está presente y se alimentan de carne seca. Las ratas son una en su conjunto, nada por separado. Atacan a quien no se mueve ni hace ruido, incapaces de revelarse contra la auténtica fuente de sus críticas. Viven frustradas por su incapacidad de comprender a las razas que se hayan fuera de su sistema y sienten envidia hacia quienes la lepra de la mediocridad no ha hecho mella. Intentan destruir los entornos de su alrededor con el veneno de la discordia, con mordeduras y ataques provocados por la ignorancia que origina su desconocimiento, la lectura de las situaciones.

Las ratas en las paredes de Lovecraft escaparon de la cripta y ahora recorren la ciudad camufladas en la basura, persiguiendo a sus habitantes. La basura, la basura por doquier. La inofensiva de mi cuarto, mi acompañante, y la del asfalto, inesperada y cruel visitante.

Que alguien traiga una escoba.
O una pinza para la nariz.
O un bidón de gasolina y una cerilla.

domingo, 9 de mayo de 2010

Roca forestal

Has tenido suerte de llegarme a conocer
creo que a nadie le gusta el nacer para perder
abrirás una revista y me encontrarás a mí
debo ser algo payaso pero eso me hace feliz.

Invertiré mucha pasta me dice mi productor
con el objeto de hacerme estrella de Rock and Roll
me dice yo te haré rico tú sólo has de cantar bien
si no te pegan diez tiros en la puerta de un hotel.

Me verás en los carteles para hacerte irme detrás
te creerás que soy alguien con un toque especial
soy un chico de la calle que vive su canción
también me emborracho y lloro cuando tengo depresión.

En la lluvia pondré mi corazón de Rock and Roll
y cuando me llene el cuerpo de anfetas y de alcohol
querré alguien a mi lado que me recoja al caer
así nena tendré suerte de llegarte a conocer.

Uhu, uhu… uhu, nena
voy a ser una Rock And Roll Star.

Extremos

Mitin del PP, Alcalá de Henares. El Follonero, humorista y dilatador de llagas, se enfrenta a una masa arrugada de virulentos seguidores de la derecha más reaccionaria sin más escudo que la espuma de la SER que envuelve su micrófono. Si no hubiese cámaras delante, los asistentes sustituirían sus pancartas y banderas por antorchas y cadenas. “¡Quemad al rojo, es una bruja!”. Bienvenidos a Salem muchachos, no olvidéis guardaros un trozo de cristal en el bolsillo por si las cosas se complican.

Lo primero que pensé tras ver el vídeo fue en el bonito recuerdo que se llevaría Jordi Évole de mi ciudad. No sé si su presencia en Alcalá fue fortuita o estudiada, pero parece más probable la segunda opción. Me es fácil imaginar al equipo de El Terrat reunido, buscando delante del mapa de España la ciudad con el índice más alto de nostálgicos de la dictadura y apuntar unánimemente la ciudad referencia del este de la comunidad madrileña. Pasarían por alto Valladolid.

El Follonero quiso meterse en la piel de un reportero de la popular radio propiedad de Prisa e introducirse en un ambiente hostil para descubrir si el arsénico de verdad hace daño. Plomo para su cuerpo, carne para su programa. Sabía a lo que se exponía, y aún así dejó que las cosas fluyeran solas, sin provocaciones, dejando que los ataques llegaran a él sin que abriese la boca. Y el pez mordió el anzuelo. En este caso, la piraña.

Por un momento parecía el sustituto idóneo de aquella estrella fugaz televisiva llamado El cómico suicida, sin embargo y estableciendo comparaciones, aquí la sensación de peligro y desamparo me era más cercana porque quienes concentraban su odio hacia el showman de la Sexta eran los mismos que daban de comer a las palomas en mi barrio. Abuelos hostigando y recriminando al Follonero sin que éste sacase a relucir su pólvora. No le dio tiempo. Los habitantes de mi condado disparan y luego preguntan, y eso sin saber quién era realmente porque le tenían por un periodista de la SER.



Al margen del conflicto, me llamó la atención la numerosísima afluencia de gente mayor que inundaba el mitin. Es más, no vislumbré a ninguna persona menor de cuarenta años en todo el reportaje. ¿Son estas personas la primera fila del ejército del odio? ¿Qué ocurrirá cuando esta generación desaparezca? ¿Sustituirán a esta masa de locos ? Por supuesto. Doy por hecho que se habrán ocupado de plantar su semilla y de criar a sus cachorros para que se comporten como ellos. Morded perritos, id a por el palo.

La hidra de la política más radical se reproduce como la gripe, y aunque sus cabezas caigan siempre aparecerán otras nuevas que lleven la voz cantante. Si creéis que existe solución, haceos con una de sus antorchas y quemad el orificio que deja su decapitación; así acabó Hércules con el monstruo. Sin embargo, la alternativa al conflicto dialéctico y físico se presenta más interesante. Que muestren sus carencias. Desnudad su moral con astucia, que se refugien en el silencio ante acusaciones fundamentadas. Es preferible despojarles de sus armas antes que batirse en duelo, dejarles en evidencia a patearles en el metro. Que ceda su telón y la sociedad aprenda a no acercarse a algo que huele a podrido. Que los niños no toquen la caca para que no se ensucien. Desabastezcamos su regimiento quitándoles las caretas.

No creo que la maldad pueda extirparse del ser humano, así que mejor desmantelar que destruir. Eso sí, no nos vayamos a equivocar de cables.

Y por supuesto, meteos las etiquetas por donde queráis; hablo de la locura y no de la guarrería que guardan bajo la alfombra los partidos políticos. Sacad a los desquiciados de las calles, se pinten la cara de rojo o de azul, lleven rosas o vuelen. Lo que sucede es que en mi ciudad de cigüeñas son las gaviotas quienes empapan mi cabeza, así que los tiros en este caso van al aire.

¡Plato!

Aquellos de los que no hablamos

"¿Quieres saber por qué te he reconocido? Algunas personas, sólo unas pocas, despiden un ligerísimo color... es tenue, una neblina, es lo único que veo en la oscuridad."

"A veces no hacemos cosas que queremos hacer para que los demás no sepan que queremos hacerlas"

"Existen secretos en cada rincón de este pueblo. ¿No lo sientes? ¿No lo ves?"


The Village (El Bosque)
de M. Night Shyamalan


Genialidad de película.

jueves, 11 de marzo de 2010

11-M



Marcado en el calendario, tatuado en la memoria.

En la niebla del aula

Las serpientes se despertaron por culpa de los gorilas, quienes hacían demasiado ruido jugando en la profundidad de la selva.

Molesta y enrabietada, como una peluquera adolescente tras perderse Gran Hermano, la víbora mayor intentó inyectar su veneno de segunda categoría en el cuello de los primates. Quería introducir las toxinas de su griterío en sus agitadas venas, que convulsionaran para conseguir un gesto de arrepentimiento.

Pero la piel de los gorilas era demasiado gruesa.

No hubo pinchazo, ni glóbulos rojos derramados. Los peludos animales admitieron su infantil conducta, para luego mirar de arriba a abajo a sus siseantes amigas y dedicarles un humillante giro de espalda.

Total, sólo se trata de unas insignificantes serpientes. Qué sabrán ellas de golpearse el pecho con los puños, de enseñar los dientes con cada grito de guerra.

Son las leyes de la selva, establecidas por un mundo imperfecto.
Acostumbraos, serpientes.

Palabrería

Sí, he quitado el contador de visitas. Y no, no se debe a que no pasara de dos dígitos. Simplemente he decidido prescindir de un gadget masturbador de egos que únicamente me servía para recibir un aplauso personal e intransferible cada vez que comprobaba que un número indeterminado de personas había perdido el tiempo metiéndose en el blog. Estúpidas aplicaciones.

Bah, a quién quiero engañar.
Simplemente no hacía bonito, y punto.

Además, ¿de qué me sirve saber cuánta gente entra si no recibo dinero alguno por visita?

Últimamente sueño con que me paguen hasta por dormir.
Necesito un trabajo.

Actualización: he vuelto a instalar el contador de visitas. Estoy muy ciclotímico.

El circo abre sus puertas

Incurablemente subversivo. Foco de miradas prensadas, de dedos acusadores y susurros en forma de bisturí. Sastre italiano de improperios; imán para las discusiones. Rozando la impertinencia en cada cuadro que descompone. Nocivamente escéptico ante las luces de colores y crítico con esa cuchilla empapada en sangre de Afrodita llamada piropo.

En ocasiones, y por mucho que nos altere el sueño, es preferible dejar a la bestia que ronque antes que despertarla.

viernes, 19 de febrero de 2010

Pasando de largo

Hay gente que me cae tan mal, que hasta sueño que no la saludo.

jueves, 18 de febrero de 2010

Cogito ergo sum

- ¿Qué te gustaría hacer?
- Escribir.
- ¿Escribes mucho?
- En realidad, pienso más de lo que escribo.
- ¿Y en qué piensas?
- Pienso en escribir.
- Escribe entonces.
- ¿El qué?
- Tú sabrás.
- Pensemos.
- ¡Escribe idiota, no pienses!
- Bien pensado.
- Dejémoslo.
- No, no. Escribiré lo que pienso.
- Adelante.
- Voy.
- Pues vamos.
- He dicho que ya voy.
- No te veo escribiendo, ¿qué te pasa?
- Nada, es...
- ¿Miedo?
- No sé.
- ¿Entonces?
- Pensándolo mejor, escribiré luego.
- Cobarde.

Grata sorpresa

Escuchadlo bien alto.

Joell Ortiz feat. Novel - "Call me"



Esperando con ganas el nuevo disco de este hombre.
20 de Abril, The Free Agent.

martes, 9 de febrero de 2010

The Best

George Best, futbolista nacido en Irlanda del Norte y ganador del Balón de Oro en 1968, es una de las leyendas que atesora la historia del Manchester United. Exitoso tanto en los terrenos de juego como entre las piernas de las mujeres, este vividor y bebedor (muy bebedor) deportista nos dejó para el recuerdo una galería de frases memorables. Que las disfruten:

"Gasté mucho dinero en bebida, mujeres y coches. El resto lo desperdicié".

"Yo podía jugar con las dos piernas, marcaba goles, muchos de ellos con la cabeza. Busby decía de mí que era el mejor en la disputa del balón. Trabajaba duro en la cancha, retrocedía a defender si hacía falta. Si perdía la pelota, era un insulto personal y la quería recuperar. Sí señor, me fastidiaba mucho que me la quitaran, porque era MI pelota."


Qué podía esperar la familia de un tipo que, tras un transplante de riñón, se atrevía con este tipo de perlas: “Estuve allí dentro unas diez horas y me tome unas cuarenta pintas. Batí mi record por veinte minutos”. Comparaba la cantidad de transfusiones de sangre con pintas de cerveza.

“He dejado de beber, pero sólo cuando duermo”.

"En 1969 dejé las mujeres y la bebida, pero fueron los peores veinte minutos de mi vida”.

“Antes, Robert Redford era un tipo muy atractivo. Ahora, mírale, está flojo, tiene la piel colgando y de un color muy extraño”.

“No le pega con la izquierda, no cabecea, no defiende y no marca muchos goles. Aparte de eso, está bien”. (Hablando de David Beckham).

“Hace años dije que si me daban a elegir entre marcar un golazo al Liverpool o acostarme con Miss Mundo iba a tener una difícil elección. Afortunadamente, he tenido la oportunidad de hacer ambas cosas”.

"Si yo hubiese nacido feo, nunca hubierais oido hablar de Pelé".

"Se dice un montón de bobadas sobre defensas rudos y jugadores destructivos. Yo les llamo simplemente hijos de mala madre".

"Cuando está borracho George es el más deplorable, burro e ignorante pedazo de mierda que he visto" (Dicho por su mujer).

"Dicen que me he acostado con siete Miss Mundo, pero sólo han sido tres".

"Nunca salía por la mañana con la intención de emborracharme. Sólo sucedía".

"Tendría que haber sido Superman para hacer algunas cosas que se suponía había hecho. He estado en seis diferentes lugares en un mismo momento". (Hablando sobre algunos bulos de su vida privada).

"Cada noche se bebe dos botellas de champaña con vodka, y por la mañana es imposible levantarle para que vaya a los entrenamientos." (Su mujer).

"Cada vez que entro en un sitio hay sesenta personas que quieren invitarme a beber, y yo no sé decir que no."

"En cierto modo, Angie me salvó y, probablemente, lo lamentará el resto de su vida". (Hablando del día que intentó suicidarse).

"No me llega ni a los cordones de la botella". (Sobre Paul Gascoigne).


Aunque la bebida te mató en vida, espero que no te falte allá arriba.
Grande George.

sábado, 6 de febrero de 2010

Guantánamo Continental

Si existe algo peor que un indeseable con la música del móvil a todo volumen, son dos indeseables jugando a ver quién la tiene más larga. Y peor todavía es encontrarse en medio de tal conflicto sonoro, como fue mi caso, en un autobús nocturno de camino a la gran M.

Ellos sí que tendrían que ser tachados de malditos bastardos, y no los enfurecidos hijos de Sión. Gracias a una mezcla arrítmica de géneros musicales ejecutada desde puntos cardinales opuestos, me arrebataron sin ningún pudor treinta minutos de mi estabilidad mental, momento en el que deseaba que sus celulares estallasen en mil pedazos delante de sus ojos. ¿Es que a este tipo de personajes no se les ha ocurrido nunca comprarse unos auriculares?

Pero Dios, en su infinita sabiduría, castigó a uno de ellos sacándole la cartera de su bolsillo trasero y depositándola en el abandonado asiento. 23 gracias.

Es el karma, muchachos. Y si no que se lo digan a Pepe, el apacible trabajador de esa empresa llamada Real Madrid. En este caso fue eso, o que Casquero aprendió a hacer voodoo después de que el portugués le planchara la camiseta a patadas.

Odiad a quienes usan su móvil como guettoblaster reggaetonero. Dios también los odia. Confirmado.

Sed buenos.

jueves, 4 de febrero de 2010

Pijos, niños y pop and roll

Se ha confirmado que Hannah Montana, artista adolescente de enorme prestigio crítico, actuará el 6 de Junio en Rock in Rio-Madrid.

Como se nos ha explicado en metodología de la investigación social, para aplicar el conocimiento científico a una materia de estudio lo primero que se ha de hacer es conceptualizar los términos sobre los que vamos a trabajar. Es decir, tenemos que tener claro lo que significa cada palabra.

Pues bien, esto mismo deberían plantearse los organizadores del evento, ya que para ellos la palabra "rock" se aleja profundamente del sentido que yo le atribuyo.

Esta década musical es una broma de mal gusto.

sábado, 30 de enero de 2010

Imitad a vuestro líder

Aquí algo falla...




¿Acaso soy el único que ve esvásticas?

martes, 26 de enero de 2010

Where are you Scooby Doo?

Mi dilatada ausencia no ha sido fruto de la casualidad, y el exilio voluntario tampoco sería la respuesta más acertada. Mi ordenador decidió hace un mes darme una alegría y estropearse, así que hasta que no le han apretado las tuercas no he podido volver a actualizar con asiduidad. Este problema, sumado al correspondiente aislamiento navideño, tienen la culpa de la deserción. Podría haber escrito entradas desde cualquier otro lugar, pero tenía intención de reanudar la marcha del blog desde mi habitación.

¡He vuelto nena!